Hernández Spínola: “Hay que desterrar estereotipos y prejuicios sobre la sexualidad de mujeres con discapacidad”
El consejero de Presidencia, Justicia e Igualdad del Gobierno de Canarias, Francisco Hernández Spínola, sostiene que aunque la sexualidad de las mujeres con discapacidad es una realidad con frecuencia ignorada, no puede ser invisible. “Es necesario combatir los estereotipos existentes en la sociedad, pero también es preciso desterrar los prejuicios que las propias personas con discapacidad y su entorno más cercano tienen sobre la sexualidad”.
Así lo indicó Hernández Spínola durante la inauguración de la jornada ‘Mujeres con discapacidad y sexualidad’, organizada por el Instituto Canario de Igualdad con la colaboración de la Universidad de La Laguna, institución que acogió el pasado día 24 de mayo la celebración de la convocatoria que, con vocación pedagógica, ha tenido como objetivo derribar mitos, temores y tabúes sobre la sexualidad y las mujeres con discapacidad.
Hernández Spínola destacó en el acto de inauguración que la sociedad debe tomar conciencia de la importancia de impulsar las acciones precisas que posibiliten “que las mujeres con discapacidad tengan una vida libre de prejuicios y que puedan ejercer sus derechos sexuales”.
“Las necesidades de cada persona tienen igual importancia”, señaló el consejero de Presidencia, Justicia e Igualdad, quien afirmó que las mujeres con discapacidad se enfrentan a muchas barreras físicas y mentales y en numerosas ocasiones a la incomprensión de la sociedad. “Hay que superar tales trabas”, manifestó.
En la apertura de las jornadas también estuvieron presentes la directora del Instituto de Estudio de las Mujeres de la Universidad de La Laguna, Dolores Serrano, y la directora del Instituto Canario de Igualdad, Elena Máñez, quienes recalcaron la necesidad de hacer visible la realidad de las mujeres con discapacidad.
Serrano afirmó que la discapacidad “debe ser un asunto de relevancia en una sociedad que se dice avanzada”, por lo que consideró que el objetivo prioritario debe ser “sensibilizar a la sociedad en general e intentar, con la voluntad y el esfuerzo político, facilitar información y recursos a las mujeres con discapacidad para que puedan vivir su vida plenamente”.
Al respecto, Serrano sostuvo que hay que empezar a educar en realidades, indicó que la sociedad debe ver a estas mujeres como personas sexuales, fuera de estereotipos dañinos, y enfatizó que las mujeres con discapacidad tienen una sexualidad idéntica a la del resto de las mujeres.
Elena Máñez manifestó que en Canarias hay 75.800 mujeres con discapacidad y abogó por derribar mitos, prejuicios y temores “que crean un imaginario en el que las mujeres con discapacidad son seres asexuados”. Subrayó que las mujeres con discapacidad “tienen derecho como cualquier persona a disfrutar de su vida afectivo-sexual y a que se reconozca también su diversidad, ya que suele tener una visión exclusivamente heterosexual de las relaciones afectivas”.
La directora del Instituto Canario de Igualdad dijo que la falta de información y de formación en el ámbito afectivo-sexual “sí que es un factor que limita a las mujeres y no su discapacidad”.
Para la realización de la jornada ‘Mujeres con discapacidad y sexualidad’ , el organismo autónomo de Igualdad ha contado con la colaboraci8ón de la Universidad de La Laguna (ULL), y del Instituto de Estudios de las Mujeres y de la Unidad de Igualdad de Género de la Institución académica.
MUJERES QUE CUENTAN
La jornada ‘Mujeres con discapacidad y sexualidad’ se enmarca dentro del proyecto del Instituto Canario de Igualdad denominado ‘Mujeres que cuentan’. “Con este nombre queríamos simbolizar la doble finalidad de este proyecto: por un lado hacer visibles a las mujeres, y en especial a aquellas que son objeto de discriminación múltiple, y por otro lado, darles voz porque son mujeres que pese a esa discriminación y porque la sufren, son mujeres que cuentan en nuestra sociedad y tienen mucho que contar”, explica Elena Máñez.
Con estas jornadas, que han estado dirigidas a las y los miembros de las asociaciones de personas con discapacidad, a las familias y a los y las profesionales que trabajan con ellas, el Instituto Canario de Igualdad cumple con el compromiso adquirido el pasado año por Elena Máñez durante la realización de las jornadas ‘Violencia de género y discapacidad’.
El objetivo de esta actividad es tratar de derribar algunos mitos, temores y tabúes sobre la sexualidad, recuerda Máñez, quien recalca que a las mujeres con discapacidad “se las trata como seres asexuados, como si fueran niñas eternas y no como mujeres que tienen derecho, como cualquier persona, a disfrutar de una vida afectivo-sexual”.
La directora del Instituto Canario de Igualdad agrega que otro de los hándicaps son los temores y miedos del entorno familiar. “Temores que nacen del afecto pero que llevan a una sobreprotección que tiene consecuencias negativas para las mujeres”, indica Máñez.
En la jornada ‘Mujeres con discapacidad y sexualidad’ celebrada en La Universidad de Laguna se inscribieron 150 personas, el 6 por ciento hombres. La directora del Instituto Canario de Igualdad confía en que esta actividad suponga “un punto de arranque, un pequeño inicio hacia la ruptura de los bloqueos que impiden la plenitud sexual de las mujeres con discapacidad”.
