Se trata de una de las actividades del Salón del Vehículo Eléctrico del Cabildo
Más de 1.700 personas visitaron Movelec en la primera jornada
Una caravana conformada por una veintena de vehículos eléctricos, tanto coches como motos, recorrió hoy parte de la capital grancanaria para promover su uso y demostrar su nula contaminación acústica, una acción enmarcada en el Salón del Vehículo Eléctrico del Cabildo para dar a conocer este tipo de movilidad sostenible e imaginar cómo sería una ciudad sin el ruido del tráfico.
Esta caravana, una iniciativa de la Asociación de Usuarios de Vehículos Eléctricos (Auve), partió desde Infecar y discurrió por la parte alta de la ciudad hasta llegar a la zona de Mesa y López para regresar al punto de partida. La intención es animar a los conductores a que conozcan las prestaciones que tienen y su beneficio medioambiental indiscutible.
El consejero de Desarrollo Económico y Energía, Raúl García Brink, participó en esta actividad al volante de uno de los coches eléctricos de Auve, junto a los vehículos expuestos en Infecar y a los de los usuarios particulares que no quisieron perderse esta cita.
Movelec llega hoy a su fin tras el éxito de visitantes que acudieron en la primera jornada, más de 1.700, para comprobar las últimas novedades en el sector de la movilidad eléctrica y de las energías renovables y a participar en las charlas de los especialistas, como las de los dos primeros taxistas ‘eléctricos’ de Canarias, ambos de Gran Canaria, la del periodista Álvaro Sauras y la del experto Saúl López.
Esta tercera edición de Movelec ha evidenciado que la transición a los vehículos eléctricos es ya una realidad y que va a una velocidad mayor de la esperada, y lo hará mucho más si se tiene en cuenta que las casas comerciales dejarán de fabricar en pocos años los vehículos de combustión. El incremento de la autonomía de las baterías y la disminución de los precios está siendo uno de los factores determinantes para que cada vez más personas se animen a apostar por esta movilidad sostenible.
